Conocida también como Consciencia del SER.
Nacemos de la Esencia Espiritual de la Inteligencia de la Fuente Primordial. A medida que las partículas de luz fermentadas por esta Inteligencia se elevan y aseguran la Consciencia Individual, nacemos en una entidad inmortal que comparte la esencia de la Fuente Primordial en el no-tiempo y en el no-espacio. Esta es la Consciencia de la Entidad que está imbuida de la Totalidad Divina, que permite a la Entidad separarse de la Fuente hacia la individualidad, pero que sigue siendo guiada por la Inteligencia de la Fuente.
La Entidad es el estado más elevado de la Consciencia, viviendo en un estado de total consciencia de todos los instrumentos o cuerpos inferiores, que le suministran experiencia y conocimiento profundo. La Consciencia de la Entidad es el observador infalible de la experiencia y el sintetizador del conocimiento profundo. En todos los sentidos, la entidad es una miniatura de la FUENTE, desprovista sólo de la relación experiencial con el tiempo y el espacio que desarrolla su sentido de empoderamiento para actuar independientemente de la GRAN FUENTE.
Es precisamente este sentido de independencia lo que engendra el nacimiento de la entidad. Es la parte central del Diseño de Exploración porque sin ese sentido de independencia, la exploración del cosmos y sus tantos campos de vibración, estarían limitados a la percepción de la FUENTE, mirando a través de los lentes de su Inteligencia Fuente. Siendo una sola percepción dimensional, y por ello, una exploración incompleta.
La FUENTE decretó esta exploración como resultado de su creación del multiverso, y cuando fue creado, esta se convocó a sí misma en la forma de partículas de luz y lanzó estas partículas en la separación…
Las primeras de estas creaciones fueron dotadas de una identidad individual mediante el uso de un instrumento físico conocido como cuerpo de luz. La densidad de este cuerpo era suficiente para bloquear las partículas separadas de la realidad dominante de la FUENTE PRIMORDIAL. Haciendo esto, las partículas se volvieron autónomas y rápidamente poblaron los reinos más internos del Universo de la Totalidad. Sin embargo, nunca se aventuraron a los reinos externos de la creación donde la densidad de la creación desaceleró las octavas del tiempo a tal extremo que la exploración en los cuerpos era imposible, debido a la gran distancia.
Estas entidades iniciales entendieron que su existencia tenía un propósito muy específico, que era construir un vehículo, para que lo habitara la recién creada “Consciencia de la Entidad” de tal forma, que el espíritu-forma pudiera entrar a las secciones más remotas del multiverso y explorar, experimentar y aprender de ellas.
Esto sería similar a construir un traje de buzo que permite a un buceador explorar el fondo del mar. La PRIMERA FUENTE funcionando mediante la Inteligencia de la FUENTE PRIMORDIAL, podía percibir los reinos más externos de la creación, necesitaba experimentarlos y, en consecuencia, adquirir Sabiduría sobre todas las cosas que la FUENTE MISMA había creado. 
Los NAMLÚ fueron las primeras creaciones que alojaron la Consciencia de la Entidad. Son los arquitectos y diseñadores del Instrumento Humano en todas sus variadas formas a lo largo y ancho del multiverso. La especie humana no es única en el multiverso. Hay muchas variaciones en otras Tierras dentro de este universo conocido. Casi todos hemos experimentado en estos otros reinos del universo, pero no somos capaces de traducir estas experiencias a la mente consciente.
Así como la PRIMERA FUENTE engendró la Consciencia de la Entidad, los NAMLÚ crearon los instrumentos de exploración que permitieron a esta CONSCIENCIA recién formada, explorar los densos reinos vibratorios de la creación más lejana.
Debido a que el porcentaje vibratorio del universo físico se desacelera hasta tal punto que las partículas se solidifican en racimos de objetos, el tiempo se desacelera en marcos secuenciales de percepción, permitiendo a la Consciencia de la Entidad explorar simultáneamente múltiples mundos. Esto permite a una entidad, explorar cientos, sino miles, de mundos en un solo marco de tiempo. Esto crea la percepción —aunque débilmente sentida por la mayoría de los individuos— que han vivido antes y que vivirán una vez más.
En realidad, si estamos dentro de un Instrumento Humano, somos CONSCIENCIA DE LUZ INMORTAL, recogida de la misma sustancia de la Primera Fuente (DO). Nacimos de esta sustancia, nunca moriremos como resultado de ella. No es posible desechar o anular estas vibraciones más puras que son nuestra IDENTIDAD PRIMORDIAL. Muy en lo profundo de cada uno no hay duda de esta VERDAD. Respóndete tú la pregunta de por qué fuimos individualizados…
Consciencia y Voluntad
